Header

Header

lunes, junio 07, 2010

Autorretrato II

Y la palabra se volvió carne
y las letras fueron huesos sobre los verbos
el silencio deshojó la piel
barcos navegaron un mar desnudo
las olas definieron la forma de un cuerpo
era el día volviéndose noche,
era la noche posesionándose del día
cuando llegaron los naves de algún otro mundo
ya la conquista se había iniciado entre adoquines de vellos
habían desembarcado las sombras innombradas
sobre la isla que adquiría el nombre de un ángel sin alas
la forma de algún gemido de alguna noche
en el momento que las palabras eran aguas saldas
y la piel, otra vez la piel, la gran pregunta,
la respuesta retórica de la estoica mirada
de la que germinó la poesía en un segundo casi clandestino
donde un poeta nacía en el mástil de un barco de papel,
y un hombre, este que escribe, resucitaba taciturno
en la pequeña muerte de un poema y la sangre de algunas ganas.